Canadá ha sido capaz de capear la crisis económica mundial de mejor manera que el resto de las economías industrializadas. A nivel interno destaca el crecimiento del PIB, un bajo crecimiento de los precios y de los tipos de interés, una sólida posición fiscal, balances positivos de las empresas y de los hogares o un crecimiento en el mercado laboral. Gracias a la rápida reacción de sus políticas para afrontar la crisis y la estabilidad del sector financiero Canadá ha podido evitar la necesidad de rescates.
Canadá al igual que España pertenece al grupo de economías de última fase de desarrollo, que se refiere a aquellas economías cuyo motor de crecimiento/competitividad ha de ser impulsado por la innovación.
Sus puntos fuertes son; la calidad de sus infraestructuras en general (carreteras, ferroviaria, etc.), su mercado laboral y financiero o el buen funcionamiento y transparencia de sus instituciones. También es un país que destaca por sus buenos resultados en la educación y por tener gran capacidad para adaptarse a las tecnologías puntas, fundamental para mejorar la productividad de un país.
En lo que respecta al ámbito empresarial, según encuestas realizadas las principales barreras para llevar a cabo un negocio son el acceso a las fuentes de financiación y las elevadas tasa impositivas, no obstante existe una gran facilidad para establecer nuevos negocios en Canadá y el ambiente empresarial es muy bueno.
Respecto a las relaciones comerciales con el resto del mundo, su principal socio ha sido EEUU, no obstante en los últimos años Canadá ha diversificado sus relaciones exteriores, especialmente con la Unión Europea.
Canadá y España están comprometidos en una relación de cooperación activa basada en intereses y valores comunes. Los dos países disfrutan de una posición ventajosa en el seno de la Unión Europea y del Tratado de Libre Comercio de América del Norte y ambos son puertas de acceso a estos grandes mercados regionales.
Canadá un destino de inversión muy valorado por las empresas españolas. En los últimos años, se han producido importantes proyectos de inversión entre los dos países, especialmente en el sector energético, agroalimentario y minero así como en el de las infraestructuras y de las comunicaciones. Los sectores de oportunidad para España en Canadá son la construcción y las infraestructuras, energías alternativas, aeronáutica, biotecnología, tecnologías y medio ambiente y tecnologías de la información.
El mercado es el mundo.
Ana Sánchez
International Consultant
Globalider
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